Puede que pueda parecer un poco raro a los mis años, pero puedo decir que me gustan y mucho las series de dibujos animados. Muchas de ellas gracias a los mis fios que son devotos de los Gormitis, Codigo Lioko, el Perro Cobarde y alguna más que ahora no recuerdo del amplio catálogo de series animadas de esta época. Eso sí también seguimos viendo al gran Scooby-doo, los autos locos, Spiderman, X-men y muchos más de antaño que eran aquellas con las que nos criamos la mayoría de mis allegados.
Que tiempos aquellos en los que nos reuníamos en la calle todos los golfos del barrio para jugar a lo Mazinger Z, a los caballeros del Zodíaco, a los espadachines…. aunque, para mí, estaba por encima de todas las diversiones las pedradas con los míticos garbanceros que a más de uno le dejo sonao para toda su vida. Mención especial, para aquellos escapullamientos públicos de los prisioneros en las cuadradas columnas del patio del Baudilio Arce. Eso si era diversión (jajajajaja) – aunque no para los sufridos prisioneros que pasaban los suyo – y no como ahora que, de seguro, y tal como están las cosas, sería denunciable.
Menudas tardes nos pasábamos montando casetas con todo lo que pillábamos y destruyendo la de los grupos rivales a limpia pedrada y lo curioso que nunca nos pasó nada; joder, cualquiera se pone ahora a hacer estas cosas. Estaríamos, como poco, en casas de acogida jajajaja.
Volviendo al tema de los dibujos, recuerdo que me volvía loco la serie de “dragones y mazmorras” – que ponían los sábados y domingos después del telediario- con multitud de aventuras, magia, monstruos, el guardian de la mazmorra…..vamos que era la hostia y creo que fue aquí cuando me dí cuenta que dentro de mí moraba algo más que un guaje de teta………fue el momento en que ví que dentro de mí crecía un autentico heavy (bufff como se me va la pinza). Una vez que terminaba, recuerdo que nos íbamos raudos a invadir las casetas de los enemigos.
Lo curioso es que apenas recuerdo a los guajes que nos juntábamos para hacer el “mal” y tan solo me acuerdo de aquellos con los que seguí teniendo contacto años después como el Andrés y el Gichermo o el mismo Patatu – joder el Patatu- que habrá sido de este personaje. En fín……que así, básicamente, pasaba mi tiempo de ocio, entre otras cosas, en aquellos maravillosos años