Manowar - The Lord of Steel (Hammer Edition)

Una de acero...y una de arena. Mal, vamos. Manowar lo han vuelto a hacer. Nos han vuelto a desencantar. Joder, empieza a ser costumbre. Mala cosa.
"Warriors of the World United", nacido después de aquel trueno esplendoroso de acero americano, "Louder Than Hell", le supo a poco hasta al más fanático de los fanáticos de la banda. Los que un dia se proclamaron reyes del Heavy Metal, ala, sonando a vulgares soldados Power. Un himno para el recuerdo, que tampoco es que sea la polla, y el olvido eterno para la movida 2002.
"Gods of War", aparecido en el 2007, pese a ganar en fuerza, tampoco contentó a los fans más añejos. Joder, no era mal disco, pero era poco para la leyenda, cada vez más gris, de Manowar. "Thunder in the Sky", un EP majete, poderosote, con demasiado tufo épico pero con sabor a "Louder Than Hell", levantó los animos trás la muerte del bueno de Scott "drums of doom" Columbus. Pero, claro, como contrapunto, como movida que iba a retrasar, y aún más la nueva historia, se sacaron de la manga, y sin que nadie lo pidiese, un remake de "Battle Hymns". Mareando la perdiz. Y para nada, colega. No les quedó mal, ojo. Pero fue tan necesario como la última temporada de la serie de animación de las Tortugas Ninja.
Un montón de años después, y trás una tonelada de dvd's en vivo, anuncios de que sale el disco, de que no sale, de que si se llama "Hammer of the Gods", de que ya no se llama así, ala, ya asoma el morro.
El muy cabrón se ha retrasado, para variar, un cojón y parte del otro. Manowar siempre nos hacen lo mismo. Es buena idea. Tienes al seguidor sin dormir, esperando cada puta notícia, cada puta huella que lleve al nuevo disco. Lo tienes comiendo de tu puta mano. Eso sí, hay un peligro. Como no te lo curres, como después de una espera de cinco años no nos entregues, como poco, un "Louder Than Hell" o un "Triumph of Steel", nos cagamos en tu madre, Joey. Y, joder, con "Lord of the Steel" os habéis lucido. Decepción total. Los reyes del Metal decepcionante. Nuevo título a añadir a la cole, Joey. Los más rápidos, los que tocan más alto, los que están más cachas, los que más follan, los que hacen el clip más cutre, los que más fans leales tienen...los que más moscas matan de aburrimiento. De reyes...a percebes.
Una degeneración progresiva se observó en Manowar desde la edición del susodicho "Warriors of The World". Algo se jodió. Por siempre. El valor del guerrero, aquel motor que le mueve a conquistar reinos, a veces, mal que nos pese, decrece. Manowar, antaño excelsos mercenarios del riff y el Heavy atronador, ya nunca brillaron igual que en su era dorada (1982-1996). Nunca. Y los más fans, aquellos que tardamos en ver que la banda ya cruzó la frontera de la parodia, nos estampamos de morros con "The Lord of Steel".
La broma del año. "Y si Conan va y pierde kilos, se amaricona y encima, el muy creido, quiere conquistar Aquilonia?" Pues de eso va "The Lord of Steel", brother. De unos mendas, demasiado maduros ya para sangrar y hacer sangrar en el campo de batalla, que creen que aún pueden partir la pana. A ver, son Manowar, unos cráneos van a partir, eso queda claro. Pero se acabó lo de amontonar cadáveres, rugir sobre ellos e invocar a los dioses con cada riff. Los dioses de la guerra ya pasan del la movida clásica. Están flipando con lo último de Arch Enemy.
La portada: Una mierda. Un remake, simplón, cutresco, sin gracia ni esmero, de "Sign of the Hammer". Cuatro duros para el diseñador (quizás, a lo mejor, dos camisetas y un pase de backstage). Estoy reseñando "The Lord of Steel - Hammer Edition". Desconozco si cuando aparezca el disco de forma oficial, el 27 de éste mismo mes, se llamará al bueno de Ken Williams (el crack, el astro, que ilustra los portadones de la banda desde "Fighting the World"). Por Crom, por Odín, esperemos que así sea. Y así cambio la horrible portada. Menudo mierdón, estoy indignado. Ni la portada se salva. Con lo que he llegado a disfrutar de las esperas antes de encontrarme con la ilustración del molón guerrero sin jeto. No tiro la toalla. Espero una portada de verdad. Una portada de Manowar, joder.
Ya suena el cuerno, ya relinchan los caballos...uhmmm, no. Mira, no tengo ganas de pegarme una mega-intro para el disco, no se la merece. Primer track. Directos al asunto.
"The Lord of Steel", el temita-título, pega el primer hachazo. Un hachazo con un arma de cartón. Tal y como ya empieza la composición, con un Power bastante desnaturalizado, poco Manowar, uno ya sabe que no se encuentra ante "Wheels of Fire". Logan, el seis cuerdas más flaco que Manowar podían haber pillado para suplir al molón de David Shankle, entrega su movidilla técnico-épica, sobadota. Adams, por su parte, quién hace años que ya no ruge como un dios, sí que cumple. Ley de compensación. Ya no llega tan alto, pero sigue quemando, tiene algo más de oscuridad. Lo del bajo, uffff, de película...el sonido...¿Cómo decirlo? Una mierda. Una broma pesada. Un bajo distorsionado, como de juguete, con sonido a Megadrive. Un cachondeo. ¿Recuerdas el tema "King of Kings"? Pues, bien, sácale toda la personalidad, la potencia, y te encuentras con "The Lord of Steel". Empezamos bien. Decepción. Y en el primer temita. Lo nunca visto. Seguimos.
"Manowarriors", posiblemente, el título más ridículo en su extensa discografía (que su mérito tiene), y que, en el caso de haber contado con una producción como a las que nos tenían acostumbrados, con unos cojones como en "Triumph of Steel" o "Louder Than Hell", hablaríamos de un señor temazo, contenta, solamente, al fanático ciego. Pero muy ciego. Joey sigue jugando con la "consola", haciendo un ruido de cojones mientras mata a los marcianitos y consigue el bonus. No nos deja escuchar bien la movida, nos molesta cosa fina. Un remake sosote de su "King" (de "Louder..."), que, sin embargo, con tres cervecitas en el cuerpo, uno cantará a pleno pulmón en el show. Los coros salvan el invento.
"Born in a Grave", "Righteous Glory" (la baladita. Alejada, por miles de kilómetros, de joyitas como "Heart of Steel", "Courage" o "Master of The Wind"), "Touch the Sky", "Black List" (si la acabas sin un bostezo te regalo un posavasos) y "Expendable" (que va de guerrero y no llega ni a escudero) no nos salvan de una movida predecible, que nos aburre un montonazo (y habla un fan devoto del combo).
Repetición de esquemas en cada track, en cada surco de la obra. La producción, poco orgánica, nada metálica, como muerta, carente de fuelle (sobretodo para una movida manowariana) no ayuda nada. Los solos, técnicos, no están tan inspirados, Hamzik no aporrea a lo Columbus y un aura simplista, mega-simplista, muy pobretona, lo invade todo. Unos Manowar que no emocionan, que no logran levantarte de la silla. Ya no nos atacan con una producción recargada, como sí hicieron con sus dos movidas anteriores. Ya no hay orquestaciones a lo Basil Poledouris. Pero, joder, no sé qué es peor: si que Manowar ya no vayan de Rhapsody o que Manowar ya no tengan fuelle. Echando de menos la onda "Warriors of the World". Imagina qué momento vivimos. Hecatombe metálica, macho.
"El Gringo", el temita más redondo de la obra, el que recupera, en cierta forma, a los Manowar que amo y que amaré hasta la muerte, me hace esbozar una sonrisa. Ahora sí, joder. Me mola. Se vuelve a indagar en la movida "Louder than Hell". Y es que la obra del 96, que siempre ha parecido un producto menor frente a "Sign of the Hammer", "Kings of Metal" o "Triumph of Steel", no es tal. Eso sí, tampoco te saques la chorra. No es para correrse. El pie se mueve, haces unos cuernillos y le das a la air-guitar. Pero dáte cuenta de que no te has levantado de la silla. "El Gringo" no ha sido, por entero, perfecto. Manowar y el cine. Lo que faltaba. Justo cuando dan el salto, es cuando peor andan. El único tema que recordaremos, con el tiempo, del trabajo. Y jamás será uno de nuestros predilectos. Pérdida de tiempo headbangerista.
"Annihilation" (soporífera) y "Hail, Kill and Die", algo calenturienta, que parece que quiere unirse a los primeros tiempos de la banda, aquellos en los que Ross se pegaba unas excursiones por el mástil la mar de desvergonzadas y cañerillas mientras que Joey se dejaba la púa marcando el tempo cimmerio, sobretodo por los corillos, gana algo a mis ojos. Manowar quieren levantar el vuelo. Pero es tarde. Se acabó el trabajo. Y, a su ritmo, tal y como se las gastan, hasta el 2017 no cataremos nueva obra.
Decepción, hermano. Enorme. El peor trabajo de Manowar en toda su carrera. Un martillazo en el alma para el fan de siempre. Simples, joder. Demasiado.
2 cuernos (bajos) para "The Lord of Steel". Heavy Metal coñazo. Un insulto a su propia leyenda. Un insulto a los seguidores.
P.D: No me extraña que el guerrero sin rostro no quiera salir en la portada. Le da una verguenza terrible, pobrete.
No hay comentarios:
Publicar un comentario